La gente anda detrás
de riquezas y fama,
Aferrándose a falsas
ilusiones,
Creyendo que con esas
luces se vive la victoria,
Pero esos lujos no
son más que un vaivén.
Al borde del final
todo cambia de pertenecía,
Se descubre la
distancia entre el alma y la plata,
La muerte es una
pared, fría y reconocida,
Donde se derrumba
vano tesoro.
No hay millones que
paguen un último respiro,
Ni fama que detenga
ese paso fatal,
Siendo iguales cuando
el tiempo se nos acaba,
En el momento oscuro,
todos sin excepción.
El dinero no compra
un solo instante,
El prestigio no
elimina el fin inevitable,
La vida es un soplo,
frágil y distante,
Y en el último
suspiro es irremplazable.
¿De qué le sirve al hombre ganar
el mundo entero, si pierde la vida? O también, ¿cuánto podrá pagar el hombre
por su vida?
Muchas gracias por tomar parte de tu tiempo en leer esto en verdad que estoy muy contento, si te gusto déjame un comentario y ayúdame a compartirlo para que llegue a más personas que a ti no te cuesta nada y me ayudaría muchísimo.
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